Vicent Baixauli Comes
Presidente de la Sociedad Valenciana de Filatelistas
Académico de Número de la Real Academia Hispánica de Filatelia e Historia Postal
La pandemia del Coronavirus, nos recuerda a otras enfermedades padecidas en nuestro país en este último siglo. Se habla de la mal llamada Gripe “española”, pandemia de fines de la 1ª Guerra Mundial originada en EEUU y conocida en tierras valencianas como la “cucaracha”. Por la misma época, la Malaria, epidemia endémica en los arrozales de los pueblos vecinos a la Albufera valenciana. Siempre tenemos presente a la Tuberculosis que se potenció tras la Guerra Incivil, después la reciente pandemia gripal, y otras de menor importancia.
De todas ellas, en el ámbito postal y filatélico -antes de que empiecen las futuras emisiones benéficas contra el Coronavirus-, en España tenemos las emisiones de la tasa antituberculosa y la creación de numerosos Hospitales y Sanatorios. Pero mucho antes, existió la Colonia-Sanatorio de Fontilles y su Cartería.
la Lepra, enfermedad bíblica, a fines del s.XIX y en zonas concretas de nuestro país, constituyó un gran problema de salud pública, pero nadie hizo nada para solucionarlo.
En los inicios del XX, en las frondosas montañas del Vall de Gallinera, al norte de la provincia de Alicante, como en otras provincias españolas, los leprosos se refugiaban en las cuevas, vivían escondidos y apartados, las gentes les temían por el contagio.
El jesuita padre Carlos Ferris, comprendió: había que hacer algo por ellos. Buscó entre feligreses emprendedores y se planeó un hospital, frente a la oposición de autoridades y pueblos vecinos.
En 1909, se inauguró el recóndito sanatorio, apoyado por un colectivo cristiano, con un compromiso económico frente a la carencia de ayudas públicas.
En 1923, se iniciaba en el valle la construcción de una muralla de aislamiento de más de 3 Km que aún subsiste. El Sanatorio con el nombre de San Francisco de Borja, fue creciendo con nuevos pabellones y servicios para más de 300 pacientes.
En 1927, este lazareto acoge al Instituto Nacional de Leprología, el objetivo es similar a lazaretos anteriores como el de San Simón, Mahón, Nazaret, etc. Este año, Fontilles ya asistió al Primer Congreso Internacional antileproso en Bergen (Noruega), precisamente el médico noruego Hansen es el descubridor del bacilo productor de la Lepra.
Fontilles, es considerado como el primer centro sanitario español en su especialidad y posteriormente el mejor del mundo en cuanto a asistencia y método de investigación.
En los años 40 aparecieron las Sulfonas, que fue el medicamento decisivo, luego se mejoró el tratamiento con los Corticoides, la Talidomina, la Rifampicina, etc.
La erradicación en España, reorientó la actividad en el Sanatorio, que hoy acoge a pocos enfermos y ofrece un servicio geriátrico, pero sobre todo la investigación, formación del personal médico y el voluntariado en la lucha en el tercer mundo. En los 80, Fontilles pasa a la historia por sus éxitos, en la investigación sobre esta enfermedad del estigma y el rechazo social.
Aspectos postales
La infraestructura de las comunicaciones telefónicas y postales no empiezan a aparecer hasta el año 1928, con un teléfono en la cercana población de Campell y con un servicio público de telégrafos particular del Sanatorio.
En 1929, se le dota de Cartería, con servicio de giro postal hasta 150 pesetas y teléfono en el propio Sanatorio. En 1932, la República requisa las propiedades de la Compañía de Jesús y lo hizo con este Sanatorio, pero no pudo pues era de la sociedad civil la que con sus donativos compró los terrenos, hizo el camino de acceso en contra de los propietarios de los campos y edificó los inmuebles necesarios para albergar y tratar a los leprosos.
El 9 de agosto de 1935, se aprueba la reforma de los servicios postales rurales dependientes de la zona de Pego, y entre ellos se crea “una conducción del Correo en automóvil entre las oficinas del Ramo, en Orba y Benimaurell, sirviendo al Sanatorio de Fontilles, Campell y Fleix (10 Km de recorrido en un solo sentido)”. También se aprueba “la Cartería rural en el Sanatorio de Fontilles, con la obligación de recoger y entregar al paso de la conducción citada, y las propias de la Cartería, tres horas de servicio diario y retribución anual de 821´25 pesetas”, y “se suprime el servicio de la Peatonía de Orba a Fontilles”.
La correspondencia se encaminaba a través de los AMB Mediterráneo, cambiaba en el Alcance estación de Carcagente y enlazaba con el AMB Carcagente-Denia, se transportaba a la Estafeta de Pego desde donde seguía con las conducciones indicadas.
En 1936, además del director del Sanatorio, estaba el administrador, dos médicos, un farmacéutico y un practicante.
En el siglo transcurrido, han pasado más de 2.600 enfermos, ahora hay 55 pacientes y otros 130 en régimen ambulatorio. Esto nos indica la rareza de las piezas postales con el matasello o sello de fechas de su Cartería.
Fontilles, sigue trabajando en unos 35 proyectos con 18 países, atendiendo unos 9 millones de enfermos que se benefician de los programas internacionales sobre la lepra y otras enfermedades ligadas a la pobreza.
Siempre han sido escasas las ayudas estatales, sólo en los 80 se llega a acuerdos con la Seguridad Social.
Afortunadamente, Fontilles ha sido ayudado por sus miles de benefactores. Como asistente, viene a mi recuerdo el que centenares de parroquias valencianas en los años 60 y 70 promovían excursiones anuales para visitar a los enfermos y entregar las colaboraciones económicas de sus feligreses.
Desde www.fontilles.org se sigue ayudando económicamente al tercer mundo a erradicar la enfermedad con un sencillo tratamiento (OMS) de dos pastillas diarias durante un año por enfermo. ¡Ojala pronto pase lo mismo con el Coronavirus!.
Me ha gustado mucho .
Muchas gracias Vicent
Vicente, magnífico trabajo.
No tenia ni idea de la existencia y el trabajo de este sanatorio.
Muchas gracias, amigo, por tu enseñanza.
Enhorabuena Vicente, esto es un artículo en toda regla con investigación y búsqueda de piezas, y tema desconocido para muchos, yo entre ellos.
Un magnífico artículo de un tema desconocido para mi
Enhorabuena
Magnifico artículo, en cuanto pueda visitarte Fontilles. Desgraciadamente no podré disponer de ningún documento de ese Centro en mi colección de Hospitales
Enhorabuena