Secuelas Filatélicas de la Guerra Civil - Sociedad Filatélica de Madrid

Por Juan E. Page
De la Sociedad Filatélica de Madrid

En cierta medida el coleccionismo de nuestra Guerra Civil no termina cuando termina la guerra, sino que produce diversas secuelas. Por ejemplo, es bien sabido que hubo españoles en los campos franceses (Gurs, Argelés,…), que los hubo en los campos nazis (Mauthausen,…), que los hubo luchando con los aliados (la célebre Nueve) y que los hubo luchando en la URSS en la Segunda Guerra Mundial (la División Azul).Y hubo también algunos otros hechos, en relación con la contienda, que dieron lugar a la aparición de material coleccionable. A uno de ellos me refiero aquí: el de las tarjetas de protesta contra el régimen de Franco.

Se trata de tarjetas, en general ilustradas, dirigidas al primer secretario de las Naciones Unidas con textos variados pidiendo sanciones contra diversas actuaciones del gobierno español. Aun a riesgo de ocupar mucho espacio me atrevo a reproducir aquí cinco de ellas.

La primera, editada en Checoslovaquia, tiene texto trilingüe (checo, francés e inglés) que reza

“Solicito la intervención de las Naciones Unidas para que cese el terror que reina actualmente en España y pido que se tomen medidas eficaces, políticas y económicas, contra el régimen de Franco que es una amenaza constante para la paz y la seguridad internacionales”.

La segunda, circulada desde Polonia el 11 de noviembre de 1946, no tiene ilustración y el texto es en polaco y español, por lo que no creo necesario transcribirlo.

La tercera y la cuarta son francesas, circuladas en junio de 1947 y enero de 1952. Una de ellas es bilingüe en francés y español y la otra tiene el texto solo en francés: “Protestamos vigorosamente contra el arresto y torturas infligidas a Gregorio López Raimundo, a Isabel Vicente y a los otros 32 antifascistas acusados de haber dirigido la huelga general de Barcelona de la pasada Primavera.

Solicitamos la intervención de las Naciones Unidas para obtener la liberación inmediata de López Raimundo, Isabel Vicente y los demás camaradas, así como para hacer respetar en España los derechos fundamentales reconocidos por la Carta de las Naciones Unidas”