Por Juan E. Page
Miembro de la Sociedad Filatélica de Madrid
Una vez más escribo de lo que no se y, en este caso, lo declaro desde el principio, ya que titulo este escrito como una pregunta.
Parece que la Unión Europea en su directiva 97/67/CE estableció la necesidad de “… un ámbito liberalizado de actuación de los operadores postales, previéndose el régimen de libre concurrencia respecto de una parte muy importante del sector…”. Como resultado, España redactó la Ley Postal, de 13 de julio de 1998, en la que se introducía la mencionada libre concurrencia pero se reservaban ciertos derechos al operador del llamado “servicio postal universal”.
Cito aquellos de estos derechos reservados que considero los más fundamentales:
- 2) La recogida, admisión, clasificación, tratamiento, curso, transporte, distribución y entrega de envíos interurbanos, certificados o no, de cartas y de tarjetas postales, siempre que su peso sea igual o inferior a 350 gramos. Para que otros operadores puedan realizar estos servicios, el precio que habrán de exigir a los usuarios deberá ser, al menos, cinco veces superior al montante de la tarifa pública de los envíos ordinarios de la primera escala de peso de la categoría normalizada más rápida.
- 3) El servicio postal transfronterizo de entrada y salida de cartas y tarjetas postales, con los mismos límites de peso y precio del apartado anterior.
- 8) La distribución de los sellos de Correos u otros medios de franqueo.
- 9) Utilización exclusiva de la denominación “Correos”, del término “España” o de cualquier otro signo que identifique al operador al que se encomienda el servicio postal universal”.
El caso es que la norma debió de provocar un gran número de dudas… o que algunos quisieron saltársela.
Pongo unos ejemplos. El primero se muestra en un par de cartas circuladas desde Lanzarote a la República Checa en agosto de 1997. Conozco su historia porque van dirigidas a un buen amigo. Se depositaron en Canarias en dos servicios de correo privado: WorldMail y Mailfast y viajaron con “escala” en Rotterdam, donde se marcaron con una máquina de Porte Pagado. Desconozco la tarifa de estos servicios, pagados en España, pero claramente el de Mailfast viola la prohibición de que aparezca el término “España”.
Pero había otros métodos. Traduzco una noticia distribuida en el 2000 por eCanarias, en alemán, que informaba de que “El correo español es repetidamente criticado por el público. Después de que las voces críticas de la prensa respecto del transporte de cartas y postales ya se habían escuchado en la prensa de Gran Canaria, para el cambio de año la situación también empeoró en Tenerife. Según muchos lectores, el correo de Navidad y Año Nuevo no llegó al destino. En la mayoría de los casos, se trataba de artículos postales franqueados con «sellos» de proveedores privados TNT o iFCC International Post-Service. Pero el correo español también tendría que transportar estas cartas desde que se liberalizó el mercado».
En este contexto, una revista en Gran Canaria sospechaba que la oficina de correos española estaba almacenando estos envíos de la competencia privada. Literalmente, el informe dice: “Hasta la aclaración legal básica, todos los artículos de correo que se encuentran en los buzones de Correos con sellos de proveedores privados no se transportan, sino que se almacenan. El Correo español está actualmente en una disputa legal con proveedores privados porque continúa reclamando el monopolio de las cartas de hasta 350 gramos».
Esto también surge de una información de la oficina de correos estatal, que se publicó en cuatro idiomas. Dice literalmente: «Querido amigo, no confíe en su suerte si quiere enviar postales durante estas vacaciones. Pegue los sellos usted mismo de 70 pesetas para los países de la UE y 35 pesetas para España y deposite las postales en un buzón. Esta es la única forma en que nosotros, el Correo español, podemos garantizar que llegarán.” Es evidente que los usuarios “franqueaban” con las viñetas y depositaban el correo en el buzón del “servicio postal universal” es decir, coloquialmente, en el buzón de Correos.
Tanto TNT como iFCC tenían sus “sellos” de pre-pago, en los que por cierto aparecía de nuevo el nombre “España” pero en este caso en inglés.
Por último, reproduzco un panfleto editado por viaPostal en el 2002 en el que anuncia el primer aniversario de su puesta en marcha como primer “Operador Postal Privado” de España, que conmemora con la emisión del “primer sello emitido por un operador privado en Europa”.
Realmente se trata de una serie de ocho valores emitidos en mini-pliegos de ocho y pliegos de dieciséis valores. Acompaño la reproducción de los de 1,50€ y el mini-pliego del de 3,60€. Una vez más aparece el término “España”
Y ahora la pregunta inicial: ¿Se usaron realmente estos “sellos”? ¿Hubo otros? ¿Siguen existiendo? Seguro que algún amigo con mejores conocimientos que los míos puede completar esta información.