Por Raimundo Almeda
de la Sociedad Filatelia de Madrid
Desde la aparición del sello el 6 de mayo de 1840, el Correo tuvo en el Reino Unido un crecimiento exponencial. Los procedimientos manuales eran insuficientes para volver a tener la agilidad en el envío de la correspondencia que se tenía en el pasado.
El deseo de las autoridades para que el Correo llegara de un día para otro a todas las poblaciones de Gran Bretaña, los llevó a promover el desarrollo de máquinas canceladoras automáticas.
Los primeros experimentos empezaron en 1857 con la máquina de Pearson Hill, que era hijo del padre de la reforma postal británica sir Rowland Hill.
Replica de la primera máquina de Pearson Hill, que se encuentra en el Museo Postal Británico
Esta primera máquina, accionada con un pedal, no era eficaz, pues un empleado experimentado, era capaz de cancelar un número mayor de cartas manualmente. Desde entonces y hasta nuestros días todas las Administraciones postales importantes del mundo, han continuado investigando en sistemas de automatización tanto para cancelar los sellos como para la clasificación de la correspondencia.
Sólo entre 1857 y 1912, el GPO en Londres probó más de 80 máquinas automáticas, la mayoría de ellas de fabricación extranjera. Tales eran las necesidades de la operativa para atender al crecimiento de la correspondencia.
La segunda máquina ya más perfeccionada para el matasellado automático fue la máquina de Charles Rideout que empezó a funcionar en 1858.
En Londres, hubo dos prototipos, la máquina número 1 cuyo fechador llevaba el código “HS” y la máquina número 2, que llevaba el código “CR”. El invento había sido patentado por el yerno de Charles Rideout, George Beard, en octubre de 1857. Los dos artilugios estuvieron funcionando en prueba durante 1858 y 1859.
Inmediatamente Pearson Hill volvió a la carga, desarrollando otras máquinas, que además eran capaces de imprimir un código que diferenciaba la hora de la impronta. Otras diferenciaban por los distritos de Londres.
Aquí mostramos dos cartas canceladas con las máquinas de Rideout. La primera enviada el 28 de enero de 1859 a Madrid, con un fechador de llegada en el anverso de 1 de febrero de 1859, 12 peniques de franqueo. Corresponde a la máquina de Charles Rideout nº 1. Todas las cartas canceladas con esta máquina experimental llevaban el código “HS”. Obsérvese que la carta la pasaron tres veces por la máquina.
El contenido de la carta es una liquidación de dividendos de unas acciones de un banco de Londres.
Máquina número 1 de Charles Rideout
La segunda envuelta dirigida a Orleáns, corresponde a la máquina nº 2 de Charles Rideout. Todas las cartas canceladas con esta máquina experimental llevaban el código “CR”.
Máquina número 2 de Charles Rideout
Muy interesante, tema del que no tenía ni idea, por cierto sabes que significaba HS.
Pienso que CR era por Charles Rideout.
Un abrazo