La orden general nº 74 del Ministerio de Marina, fechada en Washington el 27 de junio de 1.908 especifica en su punto 2, que los buques de los EE.UU. con más de 650 tripulantes (oficiales y marinería) serán dotados de un funcionario de Correos de Marina y un ayudante, dando lugar a la aparición de las oficinas de correos embarcadas en los buques de guerra norteamericanos con una riquísima marcofilia e historia postal que aún continua en 2022.
Si las primeras oficinas postales se instalaron en acorazados y cruceros. Pronto un nuevo tipo de buque de guerra se convertiría en una auténtica ciudad, los portaaviones, que en ocasiones han superado las cinco mil personas entre tripulación, tropas y pilotos. Los seis portaaviones construidos antes de la 2ª Guerra Mundial en los EE.UU. se convirtieron -entre ataque y escolta- en ciento veinte durante el conflicto, a los que se han añadido treinta y tres posteriormente.
Todos han tenido oficina postal y matasellos. Han participado y participan en los conflictos del siglo XX y XXI. Muchos han resultado hundidos o han sido clave en las batallas navales, y sobre todo han atendido las necesidades postales de miles de tripulantes en medio de los océanos.
Carta remitida desde el portaviones USS Bennington
El USS Bennington colaboró en las acciones de Okinawa y el mar del Coral en 1945, anclando en la Bahía de Tokio para la rendición de Japón el 2 de septiembre de 1945
Esta presentación el ponente hace una brevísima introducción a la enorme historia postal de estos buques, clave de todas las marinas de guerra del siglo XX.
José Pedro Gómez-Agüero Jiménez es el presidente de la Sociedad Filatélica de Madrid, y vicepresidente de la Federación Española de Sociedades Filatélicas (FESOFI).
Académico de número de la Real Academia de Filatelia e Historia Postal y correspondiente de la Real Academia de la Mar es también jurado Internacional FIP de Aerofilatelia e Historia Postal, y nacional de Temática y Juvenil y ha sido Comisario por España en 15 Exposiciones Internacionales y más de una veintena de nacionales.
Matasellos tipo “Fancy” del portaaviones USS Ranger
Sus principales colecciones tratan la Intervención Francesa en España entre 1793 y 1828, la Aero filatelia española, el correo naval extranjero en la Guerra Civil y un largo etcétera por el que ha obtenido medallas de oro grande en Exposiciones nacionales e internacionales. Pero también colecciona –como tantos de nosotros- otros tópicos, en particular el tema naval, habiendo sido el fundador y presidente del Grupo de Trabajo Naval POSEIDON.
Otra área de trabajo ha sido, con la experiencia de sus más de cuarenta años de docencia, la FILATELIA JUVENIL. Es el presidente de la Comisión de FESOFI desde 2007, así como el organizador de las Exposiciones Escolares que han atendido a cientos de miles de jóvenes en España desde 1998. También fue el organizador de las Conferencias de SOFIMA hasta el año 2012.
Desde el 14 de noviembre de 1910 en que Eugene Ely despega de la cubierta del crucero USS Birmingham. Estados Unidos ha dispuesto, en los últimos cien años, de una enorme de portaaviones y portaaeronaves. Buques que, por su tamaño, representaban auténticas ciudades flotantes y que en consecuencia tenían sus necesidades de comunicación. Comunicación que en aquellos primeros años se realizaba a través del correo.
Portaaviones USS Cabot
El portaaviones USS Cabot fue posteriormente transferido a la Armada española en 1967 donde sirvió bajo la denominación de portaaviones DEDALO
En esta conferencia, José Pedro Gómez-Agüero recoge los extensos estudios del Grupo de trabajo naval Poseidón, en el que se realiza una revisión detallada de cada una de estas ciudades flotantes. Desde su origen, su hoja de servicio y su destino final, así como las distintas marcas utilizadas en las oficinas postales embarcadas a bordo utilizando para ello ejemplos procedentes de su propia colección.
Carta con franquicia postal enviada desde el portaaviones DEDALO
La Armada Española convirtió el portaaviones DEDALO en su buque insignia hasta que fue dado de baja en 1989
Una exposición trufada de anécdotas en la que Jose Pedro Gómez-Agüero ha destacado como un coleccionismo económicamente barato puede aportarnos una gran cantidad de horas de estudio interesante y muy ameno. Además nos permite afrontarlo desde distintos ángulos: por los tipos de marcas postales utilizadas o bien por periodos históricos, por su participación en las distintas campañas bélicas o, y no menos curios, por su destino final en la armada de otros países.
Aquí puedes acceder a los contenidos de la conferencia
Historia postal de los portaaviones de la marina norteamericana (PDF)