Mujeres en el cine. Elena Jordi

Mujeres en el cine. Elena JordiNo busquen la película de cine mudo «Thais”, la primera dirigida por una mujer en España, basada en la ópera de Massenet del mismo título. No la encontrarán: sabemos, por numerosas menciones, que se estrenó en 1918, pero se perdió, y hasta la fecha no se ha encontrado ninguna copia.

No busquen tampoco a su autora, Montserrat Casals Baqué; los primeros años de su vida fueron confusos, los últimos discretos: no se supo nada de ella a partir de 1929, cuando se retiró por completo, y la enterraron en un nicho anónimo en el cementerio de Les Corts, Barcelona, en 1945. Ya nadie recordaba que ese nombre era el de bautismo de la rutilante actriz Elena Jordi, bellísima actriz y empresaria teatral que en la década de 1910 fue una de las estrellas del Paralelo.

Elena Jordi

En 1918, Elena Jordi (Barcelona, 1882) se convirtió en la primera directora de cine de España por su trabajo como productora, directora y actriz en la película de cine mudo “Thais”. De la que lamentablemente no se conserva copia.

Hablamos de un momento en el que los espectáculos teatrales continuaban siendo el principal entretenimiento del pueblo, de los años de gloria de una joven Margarita Xirgú, con quien Elena compartió compañía, y del arranque de las vanguardias.

Elena había nacido en 1882; se dio a conocer con una obra de Bataille en la que se desnudaba en el escenario. Ya había interpretado la Salomé, de Oscar Wilde, y varias obras de Santiago Rusiñol, en las que posiblemente su belleza y su juventud descollaban. Poco a poco, las críticas reconocieron también su talento, El éxito que obtuvo le animó a formar su propia compañía de vodevil en 1914.

Desde 1916 comenzó a trabajar con el cinematógrafo: era una novedad cara y aún minoritaria, pero en la que se adivinaba un futuro casi sin límites. Para ese nuevo formato Elena actuó, pero también se involucró en la dirección y la producción, y, al mismo tiempo que compraba un solar en vía Layetana, con la intención de construir su propio teatro, dirigía su primera y única película: Thais.

Foto

Se desconoce que ocurrió a partir de 1918. ¿Quizás la letal epidemia de gripe, que se llevó a su compañero, marcó un antes y un después en los gustos y costumbres de quienes acudían a los teatros? ¿Pudo darse un fracaso en la elección de la temática, o se adelantó Elena a su tiempo? Las incógnitas son muchas. Thais se estrenó, pero el proyecto del teatro nunca se llevó a cabo. Ella misma apenas intervino en lo sucesivo en obras o proyectos, y su nombre y su figura se esfumaron. Como en tantos otros casos, el interés por los rostros femeninos ausentes en la historia la rescató y colocó su nombre entre las pioneras del cine.

Matasellos

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *