Por José Manuel Rodriguez
Expresidente de SOFIMA
Miembro de la Real Academia Hispánica de Filatelia e Historia Postal

En el Boletín Oficial del Estado, publicado en Burgos el 22 de Julio de 1987 se decía:

“Excmo. Sr.: Llevada a cabo la estampación de todas las clases de timbres de Correos en cantidad suficiente para atender al consumo de ellos en todo el territorio liberado, queda extinguida la necesidad de emplear para el franqueo de la correspondencia timbres emitidos por los Gobiernos anteriores a la fecha inicial del Glorioso Movimiento, y fundado además en razones de conveniencia patriótica, es llegado el momento de retirar de la circulación todos los timbres de Correos que no hayan sido emitidos por el legítimo Gobierno de España.

En atención a lo expuesto, se acuerda lo siguiente:

Transcurrido el plazo de diez días, a contar de la fecha de la publicación de esta Orden no se admitirán por las Administraciones de Correos otros timbres, para el franqueo de la correspondencia, que los emitidos por el legítimo Gobierno de España, …

…La Compañía Arrendataria de Tabacos, efectuará el canje de los timbres de Correos de emisiones anteriores que tuvieren las expendedurías, y por la C omisión de Hacienda se dictarán las disposiciones para realizar el canje de las emisiones de timbres de Correos que se retiran de la circulación que se encuentren en poder de la Compañía Arrendataria dé Tabacos o de los particulares.

Burgos 21 de Julio de 1937.— Segundo Año Triunfal.= Francisco G .Jordana.”

Esta disposición deja claro que a partir del 1 de agosto de 1937, “… en todo el territorio liberado….” dejan de ser válidos los sellos republicanos. Por extensión se asume que pasa lo mismo con las tarjetas postales oficiales y las tarjetas y sobres emitidos a petición de particulares (en nuestra jerga filatélica los enteros postales oficiales y privados), a fin de cuentas tenían impresos sellos republicanos. Obviamente acabada la guerra todo el país era “territorio liberado”.

Muchos de los sellos y enteros fueron canjeados o destruidos. Pero la situación no era fácil y no se podía desperdiciar nada, ni a nivel particular ni a nivel empresarial, por lo que algunos decidieron reutilizarlos, como si fueran simplemente tarjetas o sobres con membretes impresos, tapando o haciendo desaparecer los sellos o símbolos republicanos y, por supuesto, franqueándolos con los sellos del nuevo régimen.

Son los que los quiero presentar.

El primero (figuras 1 y 2) circula de Anchuras (Ciudad Real) a Talavera de la Reina el 19 de diciembre de 1939. Es una reutilización de la tarjeta emitida en enero de 1938, dentro de una serie de cuatro con distintos mensajes publicitarios, de estímulo al uso de los organismos del Estado para los depósitos de dinero, concretamente de la Caja Postal de Ahorros. (Figura 3)

Como podemos ver el remitente ha “raspado” el sello republicano y ha pegado el nuevo sello encima del escudo. Va franqueada con 20 cts, según tarifa de 10 de noviembre de 1938.

Fig 1

Fig 2

Fig 3

El segundo y tercer caso son otras tarjetas, esta vez reutilizando la emitida en febrero de 1932, (figura 4), la más utilizada en su momento, con 26.000.000 de ejemplares de tirada.

Fig 4

En este segundo caso el reutilizador fue Gálvez, aprovechando las tarjetas que había privatizado y que, quizás por eso no pudo canjear. La hizo circular de Madrid a la Habana del 16 de febrero al 12 de marzo de 1941, anunciando que reiniciará, cuando pueda, la edición de MADRID FILATELICO. Para cumplir lo ordenado tapa el sello y el escudo republicanos con dos sello de 10cts. (Figuras 5 y 6)

Fig 5

Fig 6

El tercer caso es otra reutilización, también sobre la tarjeta de la figura 3. La BANCA ARNUS debía de tener un gran stock porque en el año 1947 seguía usándolos. Este circula de Manresa, 24 de marzo, a Puigcerdá el 27 de marzo de 1947, ¡ocho años después de acabada la guerra!. En este caso el sello y escudo republicanos escondidos tras los sellos de 10cts y 15cts, 25cts,  con los que no llega a completar la tarifa, 35cts, de 1-1-1947. Pese a todo no fue tasada. (Figuras 7 y 8)

Fig 7

Fig 8

Por último os presento el siguiente sobre. Cuando lo vi era tal como aparece en las figuras 9 y 10. Me interesó por el sello de Homenaje al Ejército. Pero inmediatamente vi la numeración roja de la parte inferior y me recordó al sobre entero postal de la figura 11 lo compré, sin haber confirmado que era un entero privado reutilizado.

Fig 9

Circuló desde Madrid el 19 de julio de 1939, con un sello de Homenaje al Ejército, obligatorio desde el 15 al 25 de julio de 1939, y franqueado con un sello de 40cts, según tarifa de 10-11-1938.

Fig 10

Le desprendí, con mucho cuidado, el sello de Isabel y quedó al descubierto el sello republicano, como aparece en la figura 12. ¡Era un entero privado reutilizado!

Fig 11

Fig 12

Esto pasó en nuestra postguerra, cuando la necesidad era mucha y los recursos pocos. No se podía desperdiciar nada y todo debía ser reutilizado.

Creo que debemos ir haciéndonos a la idea de que la era de las vacas gordas ha pasado y aprender de la actitud de los que les tocó vivir en años difíciles sin tirar nada.