Por Raimundo Almeda
de la Sociedad Filatelia de Madrid
Algunas veces las autoridades tienen que poner firmes a sus subordinados desde el principio, como es el caso de este escrito fechado el 22 de febrero de 1856.
Figura 1. Carta de 22 de febrero de 1856
En el escrito enviado por el Gobierno provincial de Cáceres al Sr. presidente del Ayuntamiento de Huélaga, (figura 1) se le instaba a que procediera a la contratación de un conductor distribuidor de la correspondencia, para que de esa manera se pudiera liberar a la población de la pesada carga de llevar su correspondencia a la estafeta más cercana y le conmina a que en el término de seis días le diga cuál es la cantidad que puede aportar para establecer este servicio, que en ningún caso podrá ser inferior a 240 reales.
Estando obligado a proponer al gobierno de Cáceres los candidatos en terna, los cuales, deberán preferiblemente estar licenciados del ejército, y saber leer y escribir. Por último, le ordena que estas diligencias las lleve a cabo a la mayor brevedad y exactitud posible.
Seguramente el representante del gobierno de Cáceres debió tener la callada por respuesta, pues aquí muestro otra carta con el mismo remitente y destinatario fechada el 12 de marzo (figura 2). Esta nueva misiva comienza así: “El 22 de febrero pasado, dije a usted lo siguiente …” y repite punto por punto todo lo dicho en la carta del 22 de febrero.
Al final de esta copia le dice: “No habiendo recibido hasta el día contestación alguna a la presente comunicación, prevengo a V, que si a correo vuelta no cumple con cuanto se le ordena adoptaré una medida que le sea sensible”. Y a continuación la firma y antefirma “El encargado del Gobierno”.
Desconozco las medidas sensibles que se le pudieran aplicar al Sr. Presidente del Ayuntamiento de Huélaga, Cáceres. ¿Una multa?, ¿Una destitución?. Sin duda, alguna forma de sodomía en sentido figurado.
En cualquier caso, tuvo un efecto inmediato porque en la figura 1 en el frente de la carta con tinta más oscura, se puede leer: “Huélaga, 17 de marzo de 1856. Contestado en este día al Sr. Gobernador sobre encargado de la correspondencia…”.
Ya no he sido capaz de entender más, por lo que me quedo en la duda, si le consiguió dar una larga cambiada al gobernador o se plegó a sus órdenes. Sospecho que ponga lo que ponga en la nota, al final tendría que doblegarse a los deseos de la autoridad.
Figura 2. Carta de 12 de marzo de 1856
Como dato curioso, en la actualidad Huélaga tiene 200 habitantes y en el censo de 1900 contaba con 66 almas, según consta en los archivos del Instituto Nacional de Estadística.
