Vicente Baixauli Comes, socio de SOFIMA, y Presidente de la Sociedad Valenciana de Filatelistas se desplazó el pasado 4 de octubre a Madrid para hablarnos de un tema que ha investigado durante décadas desde su época de estudiante en la Universidad de Granada y sobre el que ha escrito un magnífico libro que sirvió de base a su disertación, al tiempo que su propia colección, presentada en exposiciones como de clase abierta, al contener documentación histórica y cartográfica que no podía entrar en tradicional o historia postal.
El motivo: la emisión de Granada de 1936, Un sello autorizado por la Comandancia militar granadina, y que ha sido objeto de polémica. El autor trató la génesis, emisión, circulación postal y otros aspectos filatélicos e históricos, acercándonos al conocimiento real del correo y su red de estafetas y carterías, servicios, comunicaciones en el periodo bélico, censura postal, tarifas y las marcas de franquicia. Para comenzar Vicente presentó el registro de entrada en la Delegación de Hacienda de Granada el día 16 de agosto del año 1936 de los 58.800 sellos emitidos y la salida, el día 17 de agosto, para la Compañía Arrendataria de Tabacos, como organismo dedicado a la distribución de los mismos por ser rentas estancadas.
Una de las primeras cartas, de Granada a Armilla el 25 de agosto de 1936.
Con la descripción de más de cincuenta matasellos diferentes pertenecientes a más de cuarenta poblaciones, afirmó que se invalida el viejo concepto que hablaba de una emisión local, así como el tratamiento como sello benéfico puesto que, sirvió para franquear todo tipo de correspondencia. Especialmente interesante fue el detallado análisis de la circulación del sello con marcas de diferentes ambulantes, correspondencia al extranjero o la transportada por aviones militares.
Especialmente interesante fue el detallado análisis de la circulación del sello con marcas de diferentes ambulantes, correspondencia al extranjero o la transportada por aviones militares.
Siempre con la meta de demostrar que la emisión, circuló normalmente hasta su agotamiento natural en todas estas poblaciones, sin especulación ni acaparación gracias al control de la autoridad militar que evitó prácticas fraudulentas, variedades artificiales y otras manipulaciones filatélicas al uso, Relacionó la distribución correcta a todos los estancos y poblaciones de la zona sublevada y a las conquistadas con ejemplos de más de 25 cartas, 40 fragmentos y 60 sellos con fechadores de poblaciones.
Cerificado de Granada a Avila con bloque de cuatro con viñeta benéfica y sello obligatorio de sobretasa.
El sello azul dentado de 30 céntimos, objeto de la conferencia fue emitido con carácter de emergencia o provisional, con una distribución y circulación real que la hacen una emisión atractiva y fuente de gran información filatélica y postal. Comentó que la falta de acaparamiento originó su uso masivo en el franqueo y posibilitó la posterior emisión de varios falsos destinados al uso filatélico de los muchísimos coleccionistas que no pudieron conseguir los sellos originales debido a la corta tirada utilizada realmente para franqueo.
Carta por correo aéreo a Alemania y marca de censura militar del tránsito por Salamanca.