Por Antoni Rigo
De la Sociedad Filatélica de Madrid
Presidente de la Comisión de Astrofilatelia de FESOFI
La mayor dificultad a la que se enfrentan los aviones de la Armada se encuentra a la hora de despegar y aterrizar en plataformas móviles, esto es, en buques que van surcando los mares y océanos de nuestro planeta.
A pesar de que los portaaviones han ido ampliando su tamaño hasta convertirse en auténticas fortalezas flotantes, y a que sus pistas se trazan de forma transversal sobre su cubierta para aprovechar al máximo su longitud, el resultado es que muchas veces los aviones requieren de sistemas auxiliares de apoyo tanto al despegue (por ejemplo la elevación de la cubierta en forma de rampa) como al aterrizaje (con una cuerdas tensoras que atrapan al avión hasta frenarlo en seco).
Es obvio que los helicópteros, por sus especiales características de despegue y aterrizaje vertical, no presentan esta dificultad y que pueden posarse en cualquier espacio de un tamaño similar al de sus palas.
Por este motivo, a finales de la década de los cincuenta, la US Navy junto al resto de fuerzas armadas de los Estados Unidos, solicitó al fabricante aeronáutico Ling-Temco-Vought (siglas LTV) bajo supervisión de la NASA, el diseño y fabricación de un avión que pudiera despegar y aterrizar verticalmente.
© Wikipedia. Prototipo de LTV XC-142
El primer prototipo de este avión denominado LTV XC-142 voló el 29 de septiembre de 1964.
El concepto de vuelo denominado VSTOL (por sus siglas en inglés Vertical/Short/Take-Off/Landing, despegues y aterrizajes verticales cortos) se desarrolló mediante un avión de alas basculantes o giratorias, de tal forma que para despegar el avión giraba sus alas a la posición vertical para que las hélices hicieran despegar y/o aterrizar al aparato de forma vertical, mientras que en pleno vuelo, giraba las alas a la posición horizontal y el aparato se desplazaba como un avión convencional.
El 10 de Mayo de 1967 un avión LTV XC-142 transportó por primera vez correo desde la cubierta del portaaviones USS Saratoga (CVA-60) hasta la base aeronaval de Rota.
Se emitieron 3.000 sobres oficiales como el de la imagen a los que se les añadió la etiqueta rectangular con la descripción del primer transporte de correo por este tipo de avión. Tanto el sello como la etiqueta fueron cancelados con el matasellos manual del buque el día del acontecimiento.
En el mensaje enviado por el marinero E. Campbell a sus padres se cita el transporte de esta carta por este avión.
Finalmente, cabe decir que de este avión se construyeron sólo cinco prototipos y su inclusión en las fuerzas armadas fue descartada porque otros aviones, también en desarrollo por aquella época, ofrecían mejores prestaciones.
No lo conocía.
Una magnífica pieza y una gran información
Gracias José Pedro.
De eso se trata precisamente esta sección, ¿verdad?. De dar a conocer piezas poco o nunca vistas.
Un abrazo