Mario Sánchez Cachero
Miembro de la Sociedad Filatélica de Madrid
Un sobre que, en principio sin mayor interés, puede ser la chispa que encienda la curiosidad del coleccionista. La curiosidad que hoy traemos a esta página es un ejemplo de ello, haciendo que su poseedor, quien esto escribe, quisiera conocer más sobre su remitente y los lugares relacionados con el envío.
El sobre, dirigido a D. Evaristo Cejador, domiciliado en Ateca (Zaragoza), va franqueado con un sello de 15 céntimos de la emisión Pelón, con la efigie de un Alfonso XIII de tres años de edad, matasellado con un fechador del tipo Puente de Madrid el 23 de abril de 1899.
Sede de la Compañía Colonial, ubicada en el número 18 de la calle Mayor
El remitente, y aquí empieza el “flechazo” con la carta, es la Compañía Colonial, cuya sede se encontraba en el número 18 de la calle Mayor, hoy rotulado con el 16. En aquel año no existía aún la espléndida fachada modernista del inmueble que hoy podemos admirar, construida por Pedro y Miguel Mathet, padre e hijo, entre 1906 y 1909. Esta última fecha. junto a la firma de los arquitectos, se encuentra en una bella inscripción junto al portal del edificio.
Buscando algún fechador de llegada, volteamos el sobre. Es entonces cuando comprobamos el potencial del que hablábamos al principio de esta entrada. En el reverso se encuentra un magnífico grabado de la fábrica, ubicada en la villa de Pinto, donde se trasladó desde la Plaza de Neptuno, en el solar del actual Hotel Ritz.
De nuevo, la chispa de los recuerdos espoleó nuestra mente: una chimenea de ladrillo cercana a la estación de ferrocarril de la localidad pinteña.
El matasellos de llegada a Ateca está marcado con la fecha 23 de abril, el siguiente a su partida de Madrid. Por desgracia, no es tan legible como el de salida.
¿Por qué no buscar en Pinto algún vestigio de la antigua fábrica de la Compañía Colonial? Hacia allí nos dirigimos y, para nuestra sorpresa, los encontramos. Aunque el complejo fabril no existe en la actualidad, su esbelta chimenea, en efecto, se alza a pocos metros de la estación ferroviaria y del gran símbolo de Pinto: la Torre de Éboli, también visible en el grabado del sobre. A su alrededor, una plaza triangular de modernos edificios soportalados, ocupa el lugar en que se alzara la fábrica de la Compañía Colonial. Dos edificios se conservan todavía: uno, en estilo neomudéjar, está ocupado por dependencias del ayuntamiento pinteño. El otro, muy remozado, es la sede del Centro de Mayores Mariano José de Larra. La plaza está dedicada a Jaime Méric, fundador y director de la empresa, cuyo busto rinde un merecido homenaje a quien llevó la prosperidad industrial a la pequeña villa de Pinto.
Antiguo almacén de la Compañía Colonial hoy ocupado por dependencias del ayuntamiento pinteño | Sede del Centro de Mayores Mariano José de Larra |
Comprobamos como una simple carta, en cuyo frontal nada parece destacar, nos lleva a conocer un lugar y una historia, ayudando a recordar una antigua fábrica hoy desaparecida. La Filatelia pone de este modo su grano de arena en la supervivencia emocional y memorial de la vieja fábrica de la Compañía Colonial.