El domingo 28 de febrero de 2016, dentro del ciclo de tertulias organizado por la SOFIMA, bajo el título de “Los pueblos de Madrid”, Mario Sánchez Cachero trató un tema que, cuanto menos, resulta curioso y original: los fechadores de los pueblos anexionados por Madrid, desde Alfonso XIII al franquismo.

Mario Sánchez Cachero es miembro de Sofima y de Afinet y coleccionista de esta peculiar temática, así como estudioso de la historia postal de estos antiguos pueblos, absorbidos por Madrid entre 1948 y 1954. Durante la reunión mostró diferentes piezas de su colección, todas relativas al correo, tanto remitido como recibido en lugares como Chamartín de la Rosa, Vicálvaro, Vallecas o Fuencarral, entre otros, tanto antes como después de hacerse efectivos sus diferentes procesos de incorporación a Madrid.

Después de una breve presentación sobre el ponente, en la que se destacaron sus diferentes facetas, éste comenzó su charla con una somera explicación del proceso de anexión de los antiguos municipios y las fechas en que éstos se incorporaron definitivamente a Madrid, perdiendo su independencia municipal. Terminado este pequeño preámbulo empezó la tertulia propiamente dicha, en la que Mario Sánchez mostró diversos ejemplos de su colección, cuyo índice de rareza hace que incorporar nuevas piezas a la misma no sea tarea fácil, como reconoció el ponente en un momento de su disertación.

A lo largo de la tertulia, Mario Sánchez exhibió diferentes tipos de fechadores y matasellos, incluyendo algunos de tipo puente, certificados, carterías, e, incluso, franqueos mecánicos, que desfilaron ante los ojos de los asistentes, los que, atentos a las sus explicaciones, amenizaron el debate con sus opiniones y comentarios, muchos de ellos enriquecedores y de gran interés.

De igual manera, el conferenciante indicó la existencia de otros tipos de fechadores, del tipo conocido como “Baeza”, de los que lamentó no mostrar ninguno por ser realmente escasos.

Entre el diverso material mostrado, compuesto tanto de sellos sueltos como de cartas y tarjetas postales, algunas de ellas de cierta curiosidad, destacaba una pieza, que fue definida por el ponente como “la joya de la corona”: un sobre circulado entre los juzgados municipales de Chamartín de la Rosa y de Fuencarral. Una vez recibido, el sobre fue dado la vuelta y reutilizado para hacer una posterior comunicación a Madrid. Todo ello con sus respectivos fechadores de Tetuán de las Victorias, antiguo barrio de Chamartín de la Rosa, y Fuencarral.

No menos curioso fue el ejemplo que cerraba la tertulia, un entero postal circulado ¡certificado! desde Las Ventas del Espíritu Santo, un barrio que, aunque parte de Madrid, hasta 1944 se encontraba divido entre la capital y Vicálvaro. Esta tarjeta originó, además, un entretenido debate acerca de su peculiar naturaleza.

Entre el público asistente se encontraban miembros de diferentes asociaciones culturales madrileñas, lo que reforzó una indiscutible realidad: la Filatelia constituye una parte importante de la cultura, y tertulias como la celebrada el domingo 28 de febrero lo confirman sin duda alguna.